viernes, 16 de octubre de 2009

El síndrome de la mano ajena

El síndrome de la mano ajena

¿Alguien ha oído hablar de este trastorno?

El síndrome de la mano ajena fue descrito por primera vez en 1908 en un paciente que había sufrido un infarto cerebral en el hemisferio cerebral derecho. Tras recuperarse de la experiencia, sentía que su mano izquierda “no le pertenecía”. En 1945 otro paciente comenzó a sufrir esta dolencia tras ser sometido a una cirugía radical para tratar una epilepsia. En 1972 los franceses Brion y Jedynack acuñaron la frase “le signe de la main étran- gère” (el síndrome de la mano extraña) para referirse a este trastorno. Hasta 1992 se describieron 37 casos de este síndrome; en todos ellos el paciente siente que una de sus manos ha dejado de pertenecerle, actúa por cuenta propia, trata de incomodarle, se enfrenta a su otra mano...

El síndrome de la mano ajena tiene su origen (al parecer) en una lesión en el cuerpo calloso, la estructura cerebral que conecta a ambos hemisferios. En ocasiones aparece tras una comisurotomía, intervención quirúrgica que separa ambos hemisferios del paciente para intentar curar o atenuar estados epilépticos graves. Y algunas lesiones producidas por golpes o infecciones podrían hacer aparecer este síndrome. Este tipo de lesiones producirían una “interferencia” o conflicto entre ambas manos. La mano afectada es, como siempre, la contraria al lado del cerebro donde se haya producido la lesión. Lesiones bilaterales podrían producir comportamientos extraños en ambas manos.

En ocasiones la mano afectada da muestras de una inquietante “iniciativa”. Muchos pacientes describen como su mano extraña se opone tenazmente a la sana: si intentan abrocharse la camisa con su mano sana, la otra la va desabrochando a la vez; mientras una paciente intentaba fregar los platos, su mano extraña se empeñaba en volverlos a meter en el fregadero; en un caso, cuando la mano sana trataba de escribir, la otra intentaba poner el papel fuera de su alcance... Frecuentemente los pacientes desarrollan algún tipo de teoría propia sobre el comportamiento de su mano, como pensar que está "poseída", que alguien la controla.

Podeís encontrar la descripción clínica de uno de estos casos en este link:
http://sic.uji.es/publ/edicions/jfi7/mano.pdf


En mi opinión esta enfermedad es un gran problema pues que las personas con esta afección tienen un constante problema de conflicto con su cuerpo lo que le puede acarrear problemas psicológicos y sociales.



2 comentarios:

  1. vale, con esta información quedan claros los graves problemas a los que se deben enfrentar las personas que presentan el síndrome de la mano ajena. Pero ¿Es posible la existencia de un pie ajeno? Lo he buscado y solo encontré un caso en literatura, no se si real o no. Si es posible, lo normal sería pensar que estas personas tendrían dificultades para caminar con normalidad.

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  2. “… se han publicado algunos casos aislados de manos ajenas asesinas. En un caso, después de sufrir un infarto del cuerpo calloso, una paciente vio cómo su mano izquierda desabrochaba el pijama, rompía tazas en una bandeja, luchaba con su mano derecha cuando trababa llamar por teléfono y, por último, intentaba estrangularla.”
    (Manual de Psiquiatría Médica escrito por David P. Moore, James W. Jefferson)

    También leí que un paciente descubrió que no podía hacer que su mano ajena soltase un objeto con su propia voluntad, pero sí si decía “¡Suéltalo!” en voz alta. Miguel, ¿lo que le pasa a este paciente es sólo una impresión suya o crees que en realidad puede existir una correlación entre la orden dada y la obediencia de la mano?

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